El litigio por el caso Megaupload ha sido puesto en duda por un juez estadounidense, al decir que los cargos contra su fundador, Kim Dotcom puede que no lleguen nunca a juicio.
Desde que llevaran a cabo las detenciones de los principales responsables del site, el principal temor de la defensa ha sido el de evitar una más que posible extradición de sus clientes a los Estados Unidos (prevista para agosto).
Y parece que dicho objetivo se está cumpliendo.
Un diario neozelandés asegura ahora que durante una audiencia en Virginia, el juez Liam O’Grady, dudaba si “alguna vez vamos a tener un juicio en este asunto”. El problema, un error formal.
Sin cargos relativos a una “conspiración criminal” el FBI no tendría suficientes pruebas para extraditar a Dotcom. Además, según la legislación estadounidense, pueden notificársele infracciones civiles a una empresa, sin embargo no es posible notificar una acusación penal a una compañía fuera del territorio estadounidense.
Es ya el segundo error procesal del que se está beneficiando la defensa del caso. El marzo un juzgado neozelandés declaraba nula la orden de incautación de Dotcom por ser incorrecta.
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