Los rumores sobre los futuros iPhone 5S e iPhone 6 son el calentamiento previo al lanzamiento del primer modelo, algo que se espera ocurra sobre el mes de julio. Además de un renovado iPhone 5, se espera que Apple presente en el mercado un súper terminal, capaz de enfrentarse a los dispositivos tope de gama que ya conocemos –Samsung Galaxy S4, HTC One o Sony Xperia Z– y los que se esperan –Nexus 5 o Motorola X–.
La idea que ronda por la cabeza de todos los analistas, más allá de las filtraciones sobre nuevas prestaciones, es que Apple debería conseguir un terminal que sorprendiera al público y sobre todo, fuera capaz de enfrentarse tecnológicamente a sus rivales. Esta debería ser la misión del iPhone 6.
Dado el desarrollo actual de los terminales de gama alta, ¿cómo conseguir que un producto supere a la competencia? La respuesta es fácil, aunque no lo es tanto llevarla a la práctica: integrar en el smartphone una función única, lo que esperamos que Apple consiga con la llegada de su futuro iPhone 6. Con las posibles características que se le han atribuido desde los medios de comunicación, parece que esta es la intención de Apple y, si Samsung ha ganado la batalla con su Galaxy S4 lanzando un producto de excelentes prestaciones más barato que el iPhone 5, ahora es el turno de los de Cupertino.
Posibilidades de Apple
Antes de empezar a hablar de posibilidades reales queremos dejar constancia de la imaginación de los diseñadores. Así surge un iPhone transparente del tipo del que aparece en el vídeo que os dejamos en esta noticia, un concepto creado por Dakota Adney, en el que además, se incluye un sistema de proyección para el teclado. Evidentemente, esto es imposible dado que componentes del hardware como la placa base o la batería son indispensables y no son transparentes, al menos, por ahora. Lo que sí está claro es que si Apple lanzara algo como esto, la sorpresa estaba asegurada.
Otra interesante posibilidad, dada la rivalidad de Apple con Samsung, es que el iPhone 6 llegara con un procesador Intel en su interior. El contrato entre estos dos fabricantes expira en 2014 y por tanto Intel podría ser el corazón, no solo del iPhone, también de los futuros iPad. Además, la compañía estadounidense de procesadores no tiene en mente lanzar sus propios productos, lo cual es un alivio para Apple ya que no se convertirían en competencia.
Otro campo que puede promover la compañía de la manzana es el del 3D en vivo, videollamadas incluidas. Esto tiene mucho que ver con una patente registrada la semana pasada por Apple sobre las pantallas interactivas de realidad aumentada para dispositivos multimedia o iDevices. Es decir, estamos hablando de un equipo que puede recibir vídeo en directo y que permite a la vez trabajar sobre la superficie de la pantalla sensible al tacto. Esta patente permite combinar por tanto, dos capas, una de vídeo y otra de información, sobre la pantalla del iDevice. Sus aplicaciones pueden ser: aprendizaje a distancia, usos relacionados con la medicina, sistemas de venta, etcétera.
Una pantalla muy sensible
Otra prestación que podría dar un toque singular y diferenciador al futuro iPhone 6 podría ser la implementación de la pantalla táctil ultra sensible de Sharp que permitiría a los usuarios escribir o dibujar sobre ella con un lápiz o un bolígrafo normal, sin necesidad de contar con un accesorio específico (del tipo que usan los Galaxy Note). Este tipo de pantalla necesitaría un mínimo de 5 pulgadas y se podría integrar en equipos de hasta 60 pulgadas, es decir, que además del iPhone 6, Apple podría usar esta tecnología en cualquier iPad. En realidad, esto solo son suposiciones porque no sabemos cuáles son los planes reales de los de Cupertino, pero lo que está claro es que seguro que están preparando algo para sorprender al público.
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