Conocidos por los test de caídas a las que someten diferentes dispositivos a los que, por cierto, hacen bastante perrerías, la página GizmoSlip ha decidido poner a prueba al último terminal y tope de gama de Samsung, el Galaxy S III. En el vídeo que os mostramos, primeros veréis algunas caídas habituales, desde la altura de la mano, por encima de la cintura, y al final, la destrucción final del equipo. Una pena, porque con lo que cuesta…
Este tipo de test en los que se trata de ver la resistencia ydureza de los materiales y de la construcción de los equipos móviles de última generación, se suele realizar con caídas. Las más habituales son desde el bolsillo del pantalón o desde la mano por encima de la cintura. Precisamente esta última es la que han elegido en GizmoSlip para probar hasta en tres ocasiones cómo resiste el Samsung Galaxy S III el maltrato por parte de su dueño.
Caídas
En la primera toma del vídeo, la consecuencia de la caída es un impacto en la parte inferior y posterior del S III contra el suelo, llegando a romper el cristal que protege la lente de la cámara. Es el único elemento que sobresale en la parte de atrás y el que se ve afectado por la fuerza del impacto.
En la segunda toma, el aterrizaje contra el suelo y todo el golpe se lo lleva una de las esquinas inferiores del Samsung Galaxy S III. Esta es una zona muy sensible porque con un tamaño de 4,8 pulgadas, los golpes en diagonal pueden llegar a resquebrajar por completo la pantalla. De hecho, en la repetición a cámara lenta de esta toma se pueden incluso cristales saltando. Es más, incluso la parte anterior con la pantalla se separa de la carcasa posterior.
En la tercera toma, la idea es que el terminal aterrice directamente en el asfalto con la pantalla. En esta ocasión, solo se perciben arañazos y pequeños golpes en los laterales del terminal, dejando claro que la peor caída es cuando todo el impacto lo absorbe una de las esquinas. A pesar de los tres golpes, el S III sigue funcionando.
Adiós Galaxy S III
En GizmoSlip han decidido (a partir del minuto 4:20) acabar definitivamente con el Galaxy S III haciendo que vuele, literalmente, por los aires. Si eres sensible a estas imágenes, mejor no veas el vídeo porque no queda casi ni rastro del terminal.
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