PS Vita salió al mercado la semana pasada en nuestro país. Nosotros,
tras probar a conciencia tanto el modelo Wi-Fi como el 3G y disfrutar de
unos cuantos títulos de la susodicha, os vamos a contar cuales son
nuestras impresiones generales sobre una consola que, pese a despertar
bastante incertidumbre, ha conseguido vender más de diez mil unidades
(solo en España) en sus primeros siete días. Algo tendrá el agua cuando
la bendicen, que se suele decir. Algo bueno, refrescante y lleno de
“chuladas”, como os voy a explicar en las siguientes líneas si me hacéis
el favor de seguir leyendo.
Lo primero y fundamental que se puede y debe decir sobre PS Vita es
que como juguete tecnológico, como cacharro moderno, dispositivo de ocio
electrónico portátil, o como demonios quieras llamarlo, es una
auténtica chulada. Llama la atención, y mucho, el hecho de tener
absolutamente todas las “pijadas” que uno puede esperar en un aparato de
estas características. Las entrañas a prueba de bomba capaces de mover
una réplica casi exacta de los gráficos de Uncharted era algo que todos
dábamos por hecho (lo que por otro lado no le resta mérito) y
esperábamos que estuviese ahí. Lo que no se daba tan por hecho y también
está son todo el resto de artilugios como las dos cámaras, una trasera y
otra delantera; el acelerómetro, el GPS, la conexión a Internet por 3G,
la pantalla táctil y, sobre todo, el panel táctil trasero.
Porque sí, a estas alturas todos hemos leído y escuchado sobre todos
esos gadgets, pero verlos ahí todos juntos apelotonados en un aparato de
unas dimensiones tan pequeñas y un peso tan ligero, impresiona. Dicho
esto, si bien la consola se ve bastante pequeña y cabe en un bolsillo
trasero sin demasiados problemas (comprobado), no resulta lo
suficientemente pequeña como para que presionar los botones sea incómodo
o complicado. Si tienes los dedos como morcillas de Burgos
evidentemente tendrás problemas a la hora de jugar… pero supongo que en
ese caso ya estarás acostumbrado a tenerlos con la mayoría de
dispositivos. Además, todo el espacio “ahorrado” gracias a estos botones
tan pequeños lo aprovecha una pantalla bastante grande que me ha
sorprendido gratamente principalmente por un detalle que algunos
pensarán sin importancia: no se veía rematadamente mal estando al aire
libre expuesto al sol.
Resulta inevitable hablar y dedicarle un buen párrafo a uno de los
temas más importantes de la consola: la conexión a Internet. Como la
mayoría ya sabrá pero nunca está de más aclarar, pese a que PS Vita
tenga una promoción con Vodafone, podremos introducir la tarjeta SIM de
cualquier compañía en nuestra consola 3G para acceder a Internet. Es
decir, que a efectos prácticos la PS Vita está “liberada”. Esto quiere
decir que si, por ejemplo, tienes Pepephone como yo, solo tendrías que
crear un duplicado de tu tarjeta, introducirla en la consola y empezar a
navegar. Eso sí, cuidado con la batería porque, pese a que dura más que
la de un iPhone (ya podrá), el 3G consume una auténtica barbaridad. La
ventaja de esto, claro, es que podremos, por ejemplo, hacer fotos y
“tuitearlas” en cualquier momento desde cualquier lugar. Lamentablemente
solo hay un cliente de twitter integrado en la consola, que aunque
funcional, tiene algunas carencias con respecto a los Tweetdeck,
Hootsuit y compañía.
Dejando de lado temas técnicos o de Internet, pasamos a lo más
interesante de una consola y especialmente de una consola nueva: su
catálogo. Hace unos meses, recordaréis, ya os hablé largo y tendido sobre Uncharted: Golden Abyss
y bueno, el juego sigue siendo igual de espectacular ahora que
entonces. La sensación de estar ante un título de sobremesa reducido a
una pantalla de bolsillo es espectacular, y con diferencia es el juego
más bonito (y divertido) de todos los que he podido probar hasta el
momento. Eso sí, hay otros “tapados” como Little Deviants o Reality
Fighters que aprovechan bastante bien algunas de las prestaciones de PS
Vita para proporcionar sorpresas de lo más gratificantes. El primero de
ellos, por ejemplo, tiene una serie de niveles en los que tendremos que
presionar el panel táctil trasero para elevar el terreno por el que se
mueve nuestro protagonista, de manera que tendremos la sensación de
estar introduciendo nuestras manos directamente en el escenario del
juego. El segundo, sin embargo, utilizará la cámara trasera para
convertir la habitación en la que nos encontremos en el escenario donde
pelearán nuestros personajes… aunque luego, estrictamente como juego de
peleas tampoco es gran cosa.
Ahora bien, el videojuego que más gratamente me sorprendió de todos
los que pude probar fue Gravity Rush. Para que os hagáis una idea rápida
de qué va, diré que se trata de una mezcla de plataformas y acción en
tres dimensiones en el que podremos cambiar la gravedad en cualquier
momento. Para ello solo tendremos que presionar uno de los gatillos de
la consola y, en ese momento, mover la propia consola para orientar la
dirección en la que deseamos que nuestra protagonista establezca de
nuevo la gravedad. De esta manera podremos caminar por la fachada de
edificios y volar fácilmente por los escenarios. Todo ello acompañado de
un apartado gráfico que si bien no está a la altura del ya mencionado
Uncharted, sí que resulta espectacular gracias a su estupenda dirección
artística.
En definitiva, y por si no tienes ganas de leer todo lo anterior para
obtener la conclusión rápida de alguien que ha tenido la consola en sus
manos un puñado de horas, diría que PS Vita es una auténtica chuchería
de consola. La cantidad y calidad de prestaciones es sorprendente hasta
para alguien que ya iba “preparado” para ellas como yo, y el único
inconveniente que le veo, de momento, es que su precio puede resultar
muy elevado. Sobre todo si, como supongo todo el mundo preferiría, nos
decantamos por la versión con 3G, que se nos puede ir hasta los 320€.
Ahora bien, si te sobra esa cantidad de dinero o eres de los que se
compra un iPhone nuevo cada año, aquí tienes una buena alternativa en lo
que a ocio electrónico de bolsillo se refiere.
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