Mucho, muchísimo tiempo han debido esperar los seguidores de la saga Diablo, para que Blizzard finalmente señalara en el calendario la fecha de salida de su nueva entrega, Diablo III. Han transcurrido cuatro años, donde a periodos de expectación e información les han sucedido otros de total opacidad y silencio al respecto, pero siempre destacando algo por encima de todo: ni una mínima previsión o insinuación sobre el momento de su lanzamiento. Ni siquiera hace apenas una semana se sabía cuándo iba a salir a la venta, aunque ya comenzaba a rumorearse que iba a ser en torno a abril.
Finalmente no será ese mes, sino el siguiente, como ya muchos sabrán: Blizzard ha establecido la fecha de lanzamiento de Diablo III el próximo 15 de mayo, para PC. Precisamente, señalamos ésto último no sólo para recordaros en qué plataforma saldrá, sino porque así recordamos la otra gran cuestión en torno a este nuevo título: su lanzamiento o no para PlayStation 3 y Xbox 360.
Éste ha sido un continuo debate, especialmente durante estos dos últimos años, dado que muchos jugadores reclamaban su apertura a las plataformas domésticas, frente a quienes defendían que Diablo era una marca exclusiva de PC (aunque el original saliera para la primera PlayStation).
Dicha posibilidad tomó gran fuerza cuando a finales del pasado año se publicaba una oferta de trabajo de Brizzard donde se buscaba un “responsable de asegurar la mejor implementación de un sofisticado sistema de red en consolas”, que todo el mundo identificó con el nuevo Diablo, más aún cuando, dos semanas más tarde, el Community Manager de la compañía, conocido como Bashiok colgaba en su cuenta oficial de Twitter un claro mensaje: “Josh Mosqueira es el diseñador jefe para el Diablo console project”.
Blizzard, contestó como lleva haciéndolo desde los primeros momentos: negar el desarrollo de la versión para consolas pero sin desmentir de manera definitiva y categórica que vaya a ver la luz en PlayStation 3 y Xbox 360: “La respuesta de Bashiok pretendía confirmar que estamos explorando activamente la posibilidad de desarrollar una versión para consolas de Diablo III, tal como hemos dicho en el pasado. Pero no es una confirmación de que Diablo III va a llegar a consolas”.
Pero centrémonos en las principales características de este nuevo Diablo III y que ya se pudieron apreciar en la demo abierta el pasado año. En un vistazo general, Diablo repetirá el dinamismo de sus predecesores en sus principales puntos: jugabilidad, visualización y desarrollo de la historia, por lo que los fans pueden estar seguros de que este nuevo Diablo gustará. Aunque, lógicamente, se introducirán importantes novedades.
En primer lugar, la historia: Diablo III nos situará dos décadas después de que Diablo, Mefisto y Baal abandonaran el mundo de Santuario. Pero las heridas aún permanecen abiertas, especialmente en la mente de los que lucharon. Y lo peor es que todo indica que el mal regresará pronto. Para poder derrotarle otra vez, Deckard Caín regresa a las ruinas de la catedral de Tristán, pero del cielo se precipita hacia la Tierra un furioso heraldo del Apocalipsis para reavivar el ansia de poder del mal.
Ahora, parece que el papel de Deckard Cain ha pasado a manos de su hijastra, Leah, que será quien acompañe al protagonista en su deambular por la nueva batalla, intentando descifrar los misterios de los Tres Males Primordiales, aunque, al principio, sin mucho éxito. A ella pudimos verla en el tráiler titulado Black Soulstone o Piedra del Alma Oscura, precisamente uno de los objetos claves en la historia.
Diablo III contará con cinco clases diferentes: bárbaro, hechicero, monje, mago y cazador, cuya principal novedad reside en que podremos elegir el sexo de cada uno de ellos, así como una gran libertad para gestionar los objetos, habilidades y armas que llevemos con nosotros a lo largo de la historia, lo que permitirá adaptar la estrategia a seguir dependiendo de la situación que nos encontremos.
Dentro de esa estrategia, un punto esencial va a ser la interacción con los escenarios y el entorno, que podremos utilizar en buena medida para acabar con nuestros enemigos; unos enemigos que, por otra parte, han visto mejorada de manera sustancia su Inteligencia Artificial, lo que hace más compleja su relación con sus compañeros, y que dará como resultado una cierta colaboración entre ellos para derrotarnos.
Al mismo tiempo también se han ido introduciendo un gran cantidad de pequeñas mejoras en cuanto a su jugabilidad, con el fin de hacerlo más dinámico, como la identificación de objetos (mucho más rápida ahora), o una racionalización de los mismos, con la eliminación de los que quedaban solapados con otros (la caldera de Jordán y el cubo nephalem serán eliminados por la presencia de la piedra de regreso). Para concluir, os dejamos con el vídeo que impresionó a los asistentes de a los últimos premios VGA.
Hasta aquí este pequeño repaso que iremos ampliando a medida que se acerque el día del estreno del esperado Diablo III, que recordamos (siempre es bueno tras tanta espera), será el próximo 15 de mayo, en exclusiva (por ahora) para PC.
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